La dinámica laboral exige una disponibilidad
24/7 a sus empleados, con la finalidad de tener mayor productividad y éxito
laboral. Esta estrategia puede llegar a ser muy desgastante y desmotivante, en ocasiones
los empleados tienen "miedo a ser destituidos de su puesto o incluso a
perder el empleo” es por eso que no toman días de descanso y siempre están
disponibles laboralmente.
Este tipo de personas que van priorizando
el trabajo antes que su vida llega a tener consecuencias muy severas, lo ideal
son 8 horas diarias o 48 horas semanales. Si trabaja más horas debe
reconocérseles como extras y recibir incentivos por esas horas para lograr que el
trabajador se mantenga descansado, efectivo y motivado.
Un gran número de empresas se
ven afectadas por la improductividad laboral que implican componentes como el
desánimo, desmotivación, cansancio físico y mental entre otros, esto es
derivado de la alta exigencia, estrés y poco descanso del trabajador.
Por este motivo invitamos
hacer conciencia a los jefes de que los empleados necesitan descansar para que tengan un
mejor rendimiento , pues el contar con una disponibilidad total
no garantiza productividad ni resultados exitosos.
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